En
educación de profesiones en salud, el rendimiento del razonamiento clínico (RC)
resulta en un constructo complejo y multifacetado.
Razonamiento clínico:
Fenómeno que surge a través de la
interacción entre los procesos cognitivos y físicos del profesional de la salud
adaptándose consciente e inconscientemente a las interacciones con los
pacientes y sus relaciones, miembros del equipo, evaluadores, entornos y tareas
con el propósito de resolver problemas y tomar decisiones recopilando e
interpretando continuamente los datos del paciente, pronosticando, sopesando
los beneficios y riesgos de las acciones y comprendiendo las preferencias del
paciente para desarrollar un plan diagnóstico y terapéutico que apunte a
mejorar el bienestar del paciente.
Actualmente los
comportamientos observables en la etapa clínica de grado que se recomiendan
para su evaluación transcurren alrededor de
1.
La
importancia de la dependencia de “especificidad de contexto” (para una
misma situación clínica el rendimiento del RC decae con pacientes en diferentes
ocasiones)
2.
Cómo
resuelve problemas con la toma de decisiones adecuadas;
3.
Necesidad
de multiples herramientas de evaluación para describir un cuadro general del RC.
(Rencic J. Clinical reasoning performance assessment: using
situated cognition theory as a conceptual framework)
Desde
la lente teórica teniendo como marco a la “teoría de cognición situada”,
esta podría resultar de mayor utilidad para un entendimiento mas inclusivo de
la evaluación del RC ya que exige una mayor contemplación de las complejas interacciones
de varios factores contextuales: El paciente, el estudiante, el evaluador, el
método de evaluación y el trabajo dentro de una complejidad física y del ambiente
cultural.
La cognición surge de las interacciones dinámicas entre el
médico y los factores situacionales contextuales y reconoce conocimientos más
profundos sobre el desempeño del RC y su evaluación a través del estudio de
estas interacciones. (Durning S y cols. 2010)
Modelo de cognición situada en la
evaluación del RC. (Rencic
2020)
La
teoría psicométrica, “Teoría G” (Generalizabilidad) considera al interjuego de
factores (facetas) como componentes estables, predefinidos de la evaluación del
RC. En cambio, el RC enmarcado en la teoría de la cognición situada propone que
los factores son interdependientes, dinámicos que interactúan en modo no linear
y complejo.
En
este marco y a fin de profundizar en el trabajo de los factores contextuales
que intervienen en la evaluación del RC, se pueden describir los siguientes:
Enmarcando el encuentro clínico con el paciente: Identifica y evalúa problemas activos
prioritarios (estable, inestable emergencia, interconsulta, impacto de terapias
previas)
Diagnóstico de certeza y diferenciales: Identifica gatilladores del problemas
actual, considera y reestructura diagnósticos alternativos; planifica investigación
diagnóstica, determina etiología y diagnóstico mas probable, identifica
factores de riesgo modificables, identifica complicaciones diagnósticas y/o
terapéuticas; describe posible evolución y estima el pronóstico.
Manejo clínico:
Establece objetivos de cuidados y plan de manejo (Síntomas, funcionalidad,
preferencias del paciente); evalúa impacto y consecuencias de comorbilidades;
analiza el peso de opciones terapéuticas; aplica guías clínicas/evidencia;
selecciona métodos de asesoramiento para paciente y fliares, planifica
seguimiento y estrategias de consulta acorde a evolución del paciente
Autorreflexión:
Identifica retrasos en sus conocimientos y establece un plan de aprendizaje
personal; Considera sesgos cognitivos, personales y factores confundentes que
pueden influenciar su RC. (Goldszmidt M, Acad Med.)
Un
mejor entendimiento del RC podría permitir mejorar los métodos/herramientas de
evaluación y su validez para maximizar el aprendizaje.
RC
y categorías de interacciones de los componentes (Hege
I y cols).